Así como el perfume de una flor en primavera luego de ser besada por el rocío de la mañana impregna el valle con su exquisito aroma a frescura, así tu corazón impregna tu Alma con la fragancia del Amor cuando la Vida se detiene a observar la belleza que ofrece tu completa e íntegra presencia.
Eres el regalo que la Vida a estado esperando desde el comienzo de los tiempos. Embelesas todo paisaje cuando te predispones a danzar en armonía al ritmo acompasado de una existencia plena. Has de llenar todos los espacios cuando deleitas al presente con las melodías de tu corazón contento. Eres el paisajista más buscado porque con tu esencia simple y divina colmada del más puro Ser vas decorando con flores de mil colores los agrestes desiertos de duda que pintan los portadores de la ignorancia.
Vas dejando tus huellas de pasos firmes y seguros cuando el lado activo de la Vida se enorgullece de contenerte. Siembras la semilla de la comprensión en tierras de desesperanza y portas un mensaje de Paz y Amor que hasta los sordos pueden oír; que hasta los incrédulos aplauden. Eres como el sol del verano para los congelados picos de las montañas de la confusión que esperan ser caudalosos ríos de aguas claras tras haber sido acariciados por la mano de la Verdad.
No claudiques, no vaciles, no dudes ni un solo segundo en dar un paso hacia tu libertad; hacia la plena satisfacción. Mantente despierto y alerta ante el acecho del ensueño que espera agazapado tras el árbol de la desesperanza tenderte la trampa de la desilusión. La vida es un sueño largo y prolongado para quienes descansan bajo la sombra de la pasividad a la espera de que algo maravilloso suceda. No hay pereza para quienes saben que la maravilla ya ha acontecido; que la vida está sucediendo, una y otra vez y te toca suavemente con el vaivén de la respiración.
Siembra en tierras donde abunda la tristeza con la semilla del Amor. Haz del hastío de la noche una bendición de claridad mientras derramas sobre el lienzo que teje la vida un poco de tu sutilidad. Así como las amarillas hojas al caer del árbol del otoño cubren con su manto dorado sus pies, así el sol te vestirá de oro mientras te deslizas delicadamente sobre las praderas de la paz para fundirte a la totalidad. ¿Acaso no es la paz lo que mejor sienta al rostro humano? ¿Has visto como brilla y resplandece el hombre cuya Alma ha sido colmada por la paz?
Vive el lado activo de la vida y vuela sonriente como el viento que bambolea los pastos y acaricia la existencia con su suave y vivo suspiro. Una oportunidad única e irrepetible baila frente a ti y te tiende la mano para que dances en su compañía. La Vida es una exquisita pieza de baile que deleita los oídos de los hombres intrépidos que han abandonado su asiento para marcar sus pasos en la pista. No te tapes los oídos; quítate la venda de los ojos y vuélvete un intrépido y atrevido apreciador de ésta existencia. La posibilidad está ahora frente a ti; está sucediendo en este instante y en una danza sin igual se predispone a conquistar tu corazón y llenarlo de preciosos regalos. ¿Vas a quedarte ahí sentado a esperar que algo más suceda? ¿Quién puede ser tan ingenuo de ignorar a la más bella de las ocasiones, esa a la que llaman Ahora?
Es la Vida con la musa inspiradora de la magia del presente quien te busca desesperada para regalarte oportunidad; para beneficiarte con la completitud. Hay un llamado que resuena desde el interior que, como un grito desgarrador intenta captar la atención de quienes aún no han despertado del letargo de la distracción. Tras el bullicio de la duda se esconde el silencio de la Verdad que ha de besarte un día para sellar tus labios con el lacre del Entendimiento. Mientras estés vivo una semilla de posibilidad es sembrada a cada instante en los campos de tu corazón ¿No has de querer tú recoger frutos en época de cosecha?